Cómo involucrar al cliente

Al principio, esta idea puede parecer rara. Tú deberías estar utilizando tus conocimientos del master diseño de producto online y ellos comprando. Ese es el modo en que los negocios funcionan, ¿Verdad? Pero quién dijo que tienes que apegarte a las reglas. Aunque no parezca, mucho poder yace escondido en este plan que los obligará a sentirse compelidos a comprar tu producto, compartir con otros su opinión, y dar fuerza a tu negocio, nuevas ideas sin necesidad de que desembolses dinero por este servicio.

Existen múltiples maneras de involucrarlos en tu diseño actual, pero te mostraremos algunos pocos, los mejores para que sepas como proceder.

1. Personalizar

Algunos modelos de negocio se enfocan en la personalización total de lo que venden. Esto sucede cuando le permite a tu cliente proponer una idea para el desarrollo del producto, y tu fabrica una única versión que encaje específicamente con lo que el comprador pidió.

Este es un método muy utilizado por las joyerías industriales. Ofrecen un servicio de “Diseño de joyas para clientes”, en el que el consumidor forma parte del equipo y participa de cada uno de los pasos del proceso.

La idea es darle al cliente la oportunidad de llevarse el producto que exactamente necesita.

2. Colaboración

Este es quizás el más popular de los métodos para involucrar al cliente en el proceso de diseño. Aquí, los consumidores tienen la oportunidad de colaborar con sus comentarios que serán tomados en cuenta por la empresa a la hora de fabricar el producto y puede que utilice muchos de estos consejos, en su siguiente lanzamiento.

Esto se puede realizar a través de una consulta online, en forma de foro presencial, por las redes sociales, o el medio que te venga a la mente.

3. Jugando

Otro modo puede ser que hagas del proceso algo divertido. Muchos consumidores están familiarizados con este método y responden muy bien a la propuesta. Consiste en darle al cliente una versión-base del producto y se le permite jugar con él agregando todo lo que le parezca que será útil. Una vez con todas las modificaciones aplicadas, tu empresa podrá elegir qué cosas pueden servir o no a tu negocio.

Aunque parezca extraño, en el mercado físico y más exactamente el mercado automotor utiliza muy a menudo esta técnica para llegar y ganarse el favor de sus futuros consumidores. Generalmente a través de páginas web ofrecen la oportunidad de que personalices tu automóvil. Las marcas de autos eléctricos son un muy buen ejemplo. Tienen una herramienta que permite a sus consumidores tocar cada detalle. Desde el sistema de manejo, tablero, tapizado, capacidad del auto, y un muy largo etcétera. Sus clientes reciben todo el control que desean sobre su potencial futuro vehículo.

4. Diseñando en equipo

Hacer esto en equipo es por lo menos el más común de los métodos, pero tiende a producir el mejor y más redituable de los resultados. Cuando una compañía “co-diseña”, selecciona a un puñado de los más creativos y fieles de sus clientes que crean son representantes del resto de consumidores.

Las empresas que aplican este modo, hacen equipo con estos diseñadores aficionados y les permiten participar en reuniones donde puedan expresar sus ideas para evaluar qué es lo que el resto del mercado pudiera estar buscando. Este proceso puede ser también el que más energía y tiempo requiera, pero como dijimos es el que más vale la pena al final.

Conclusión

Como empresarios no podemos dejar de lado al cliente y relegarlo al pobre papel de ser quien nos provee del dinero. Si no lo has hecho aún, debes comenzar a apreciarlos como lo que realmente son; activos invaluables para tu producto, marca o servicio.

Cada cliente ha vivido experiencias únicas, tendrá sin dudas habilidades diversas, y es el dueño de ideas que pueden llevar tu negocio a la cúspide. Uno de los mejores modos de comprometer a estos individuos y potenciar tu marca, es involucrarlos en algo tan íntimo como lo es el proceso de diseño.

Seguramente te tomará mucho tiempo el idear y aplicar este tipo de estrategias que te permita de un modo inteligente hacer que el cliente se sienta parte del proceso, ya la vez, decidir cuanta libertad, influencia, y control les vas a dar sobre el trabajo final. . Pero no puedes darte el lujo y dejar de lado esta oportunidad. Es tu oportunidad de forjar una fuerte relación con tus consumidores e introducir poderosas ideas para tu marca.