1. FriendLe no es "otro LMS": es una experiencia viva
Durante años, los LMS tradicionales han cumplido ese rol administrativo, pero no han logrado resolver el verdadero desafío: motivar a las personas a aprender de verdad. Cuando le preguntamos a Samer Soufi, CEO de Inxpiriuis, sobre las funcionalidades más innovadoras de FriendLe, su respuesta no solo fue contundente, sino profundamente reveladora porque no es un LMS que “gestiona cursos” sino un entorno donde la formación respira, evoluciona y se adapta al ritmo de cada profesional:
“FriendLe nació con una idea muy simple: que aprender en una empresa vuelva a ser algo que motive, que conecte y que transforme de verdad. Y para lograrlo, tuvimos que ir más allá del concepto tradicional de LMS. Por eso, junto a líderes de RRHH en Inxpirius creamos FriendLe, la plataforma de formación que combina IA, colaboración y gamificación de una manera muy natural, casi orgánica, donde el aprendizaje deja de ser un trámite para convertirse en una experiencia viva.”
Lo más interesante es cómo redefine el papel de la IA en la formación ya que no se limita a recomendar contenido, como sucede con la mayoría, esta plataforma funciona como un mentor digital dinámico que acompaña al usuario y potencia su aprendizaje:
“La inteligencia artificial no está ahí solo para recomendar cursos, sino para acompañar al usuario, para resolver dudas, para dinamizar conversaciones, para crear rutas personalizadas y para hacer que cada persona sienta que tiene un mentor digital que evoluciona con ella.”
Esa combinación entre cercanía y personalización genera algo que muy pocos LMS han conseguido: que el usuario quiera volver. No porque lo obliguen, no porque haya un recordatorio en el calendario, sino porque siente avance real:
“La gamificación no es un adorno, es un motor de motivación que hace que la gente vuelva porque siente progreso, porque se ve avanzar.”
Además, incorpora dinámicas que normalmente solo vemos en formaciones presenciales de alto nivel:
“Los círculos colaborativos, los role-plays con asistentes virtuales y los retos prácticos convierten la formación en algo aplicado, casi como si la plataforma ‘respirara’ junto a la empresa. Ese conjunto —IA, colaboración real, práctica continua y una experiencia fluida— es lo que hace que FriendLe no se parezca a nada de lo que se suele ver en el mercado.”
FriendLe no es una herramienta más. Es un antes y un después en cómo se vive la formación dentro de las organizaciones.
2. La alianza con Aicad: dos visiones que se complementan
Si hay algo que quedó claro durante la conversación con Samer Soufi es que la alianza entre Aicad Business School e Inxpirius no nació por casualidad ni por conveniencia tecnológica. Nació porque ambas organizaciones comparten una misma convicción: El aprendizaje del futuro debe ser más humano, más flexible y profundamente conectado con la realidad profesional.
Cuando le preguntamos cómo visualiza esta integración, Samer no habló de “incorporar una plataforma”, ni de procesos técnicos, ni de trámites operativos. Habló de visión. Habló de propósito. Y esa es exactamente la esencia de esta alianza.
“Lo bonito de la alianza con Aicad es que no se trata solo de sumar una tecnología a una escuela de negocios; se trata de unir dos visiones muy parecidas sobre el aprendizaje del futuro.”
Aicad aporta el rigor, la estructura académica, la experiencia en formación ejecutiva y presencia internacional. FriendLe añade la capa tecnológica que lleva esa experiencia al siguiente nivel:
“Visualizo a los alumnos viviendo un aprendizaje más cercano, conversacional, práctico y acompañado. No solo verán contenidos: debatirán, aplicarán, compartirán retos, harán prácticas guiadas por IA y sentirán que cada programa se adapta a ellos. Y eso, al final, mejora la experiencia, la retención y la motivación de una manera muy natural.”
En otras palabras, Aicad aporta el conocimiento, la trayectoria académica y la comunidad de profesionales.
FriendLe aporta la tecnología que convierte esa formación en una experiencia transformadora.
3. ¿Resultados reales? Sí. Y muy visibles.
Muchas plataformas prometen engagement. Pocas lo logran. Y según Samer, la clave de FriendLe está precisamente en que la gente quiere usarla:
“Creo que la gran diferencia de FriendLe es que realmente consigue que la gente participe. No porque ‘tenga que hacerlo’, sino porque quiere hacerlo.”
Ese matiz lo cambia todo. La mayoría de plataformas luchan contra una realidad incómoda: las personas entran una vez, dos como mucho, y luego abandonan. Porque no están motivadas. Porque no sienten avance. Esto se refleja en indicadores concretos:
“Cuando una empresa implementa FriendLe, lo primero que suele aparecer es un cambio en la energía: más acceso, más interacción, más finalización real de cursos, más conversación y más transferencia al trabajo diario.”
Hoy en día, cada minuto de formación debe justificar su valor y FriendLe convierte esta motivación en métricas concretas:
“Esto se traduce en métricas claras: más engagement, más aprendizaje aplicado, más identificación de talento, más cultura compartida”.
Cada uno de estos indicadores tiene un peso estratégico:
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Más engagement → empleados que participan, no porque deban, sino porque les aporta valor.
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Más aprendizaje aplicado → conocimiento que se traduce en habilidades y decisiones diarias.
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Más identificación de talento → permite detectar quién aprende rápido, quién lidera, quién destaca en colaboración.
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Más cultura compartida → las personas se conectan, debaten y construyen un lenguaje común.
Es decir, no son métricas de “pasar cursos”; son métricas de desarrollo humano, gestión del talento y madurez organizacional.
4. Proyección internacional: Aicad + FriendLe como catalizador global
Cuando le preguntamos a Samer Soufi sobre la proyección internacional nos Habló con convicción, con claridad y con una visión que va mucho más allá de la tecnología. Para él, esta alianza no es simplemente un acuerdo académico o un complemento digital: es la puerta a un nuevo modelo global de desarrollo del talento.
“Esta alianza tiene un potencial enorme. Aicad no solo abre puertas académicas, sino que amplía el impacto de FriendLe a profesionales de muchas industrias, de distintos países y con realidades diversas.”
No se trata solo de ofrecer una plataforma a más personas, sino de conectar culturas, mercados y formas de aprender bajo un mismo modelo de excelencia y cercanía. Lo más inspirador es su visión de propósito compartido:
“Lo que más me entusiasma es que juntos podemos ofrecer una experiencia que mezcla lo mejor de dos mundos: la calidad de una escuela de negocios y la tecnología que convierte esa formación en una vivencia más humana, más práctica y más transformadora.”
Y con una claridad estratégica impecable, añade:
“Para nosotros, esta alianza es un paso natural hacia una visión más grande: que FriendLe no sea solo una plataforma, sino un catalizador de nuevas formas de aprender y liderar, no solo en España, sino en toda Latinoamérica y más allá.”

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