¿Qué son las habilidades directivas?

Se trata de las capacidades y conocimientos que posee una persona, que tiene un cargo o función de dirigir a un equipo o grupo. En este sentido, utiliza dichas habilidades para procurar que los objetivos planeados sean alcanzados. Ejerciendo principalmente el liderazgo para conseguirlo, aunque esta no es la única, sí es una de las habilidades directivas estratégicas más efectivas.

Por este motivo, son altamente solicitadas por las empresas, porque no solo se necesita tener los conocimientos y la experiencia, sino también la cualidad humana para desempeñar bien un cargo. Esto se puede evidenciar en las formaciones que las empresas organizan para sus trabajadores. Estas no solo los capacitan para saber más del área, sino también para desarrollar el liderazgo, la comunicación, el trabajo en equipo, etc. Parte de las características de las habilidades directivas más necesitadas, para así garantizar que los equipos de trabajo estén bien coordinados.

Conviértete en un Experto en Comunicación y Habilidades Directivas en nuestro curso, donde aprenderás a dirigir tu equipo y alcanzar los objetivos propuestos.

¿Cuáles son las habilidades directivas más importantes?

Como hemos mencionado anteriormente, existen varias habilidades que son imprescindibles para convertirte en un buen líder. Lashabilidades directivas de una empresa, son las que el departamento de recursos humanos se encarga de determinar en los candidatos a contratar y en los trabajadores actuales. De esta manera, garantizan que su personal está capacitado para dichas funciones.

A continuación te explicaremos las habilidades directivas: lista de las más convenientes para los líderes:

#1. Liderazgo:

No es para menos empezar directamente con la más relevante de todas en este ámbito. Porque el liderazgo es la aptitud que permite que una persona pueda guiar a otros, utilizando los métodos más efectivos. Tales como el diálogo, la negociación y los acuerdos, entre otros. Asimismo, también facilita el alcance de los objetivos previstos, porque un buen líder puede evaluar y determinar las estrategias, y el personal ideal para desempeñar dicha tarea.

#2. Comunicación asertiva:

Las habilidades comunicativas son esenciales, no solo dentro del ámbito laboral, sino también en todos los aspectos de nuestra vida. Es lo que nos permite relacionarnos con otros y comprendernos mutuamente. Cabe destacar, que esto por sí solo no es suficiente. La asertividad en la comunicación, es la clave para expresarnos correctamente y al mismo tiempo tener en cuenta al otro. De esta forma manifestamos nuestras ideas efectivamente sin desvalorizar los sentimientos e ideas de los demás, procurando mantener un buen tono para llegar a un mutuo acuerdo. Uno de los ejemplos de las habilidades directivas más destacables, es que al ser asertivos evitamos las discusiones y los malos entendidos, ya que la comunicación siempre es clara y fluída.

#3. Trabajo en equipo:

Para ser un buen líder es necesario estar al frente de un equipo o grupo de personas que persiguen el mismo fin. Si bien es importante que el mismo sea el que establezca las funciones y las tareas de cada uno. También depende del trabajo individual de cada integrante del equipo para conseguirlo. Para ello deberá apoyarse en sus compañeros y cooperar entre sí para obtener resultados satisfactorios.

#4. Organización:

Alcanzar las metas depende de la buena organización de quién esté a cargo de vigilar el proyecto o al equipo. Para ello esta persona debe saber planificar y coordinar las actividades e integrantes para conseguirlo. Aplicando las habilidades de gestión evitará la improvisación, conflictos e inconvenientes que puedan presentarse. Asimismo, con un plan bien elaborado podrá prevenir los obstáculos y establecer las soluciones para ellos.

#4. Organización:

#5. Motivación:

Asumir una responsabilidad requiere en primer lugar mucho entusiasmo, iniciativa y proactividad por parte del líder. Pues es esta la persona que hará la proyección del camino idóneo para alcanzar la meta. Que en muchos casos no es tan corta, e incluso conlleva varios meses su ejecución y culminación. Para no perder el enfoque la motivación es lo más importante, porque solo así se tendrá muy claro el camino a seguir.

#6. Empatía:

Debido a que estará con diferentes personas, con diferentes ideales, percepciones y formas de trabajar. Para ello deberá mantener la tolerancia y fomentar el respeto, para que los conflictos sean solucionados efectivamente. Además de comprender las situaciones personales y grupales que puedan afectar al proyecto. Recordando en todo momento que trabaja con personas que merecen ser escuchadas y reconocidas por sus labores. Asimismo, también sabrá cómo tratar los errores o fallas sin desmotivar al equipo, enfocándose solamente en corregir o mejorar la situación.

#7. Confianza:

Puedes tener una mejora de las habilidades directivas esenciales, pero si no tienes la confianza de que lo puedes hacer, posiblemente todo se te venga abajo.

Hay que recordar que el líder es la persona que no está por encima de los demás por titulación o posición. Es la persona que estará supervisando, apoyando y resolviendo los problemas de todo el equipo. Siendo este la fuente de resolución de las dudas y situaciones. Por lo tanto, la confianza es esencial, porque si no estás seguro de lo que debes hacer o decir, los demás integrantes también se sentirán inseguros de lo que hacen. Y esto solo genera insatisfacción y frustración por la falta de dirección y decisión.

Es importante recordar que creer en nosotros mismos y en nuestros proyectos, es el ingrediente especial del éxito.

#8. Negociación:

Muchas veces se presentarán inconvenientes o situaciones donde se deberá valorar: ¿Qué es lo mejor para el equipo o proyecto?. Esto se puede solucionar fácilmente si se tiene destreza en la negociación. Porque se establecerán acuerdos en donde no solo podremos ganar, sino crear un terreno con equidad y transparencia, para que las otras partes acepten nuestras propuestas o viceversa. Saber cuándo ceder o no, e incluso hasta qué punto, es importante para garantizar que nuestras metas no se queden atrás.

#9. Toma de decisiones:

Al ser la persona que establece los métodos y las estrategias para alcanzar los objetivos. Él es quien debe tomar las decisiones necesarias para que el proyecto progrese. Evaluando siempre lo mejor, tanto para el equipo como el alcance de los objetivos propuestos. De manera de que los procesos avancen y no se detengan por los obstáculos que se presenten en el camino.

#10. Resolución de problemas:

Finalmente, la habilidad para resolver los problemas es determinante y viene de la mano con la toma de decisiones. Muchas veces, solo el líder podrá definir qué pasos serán los que seguir según la situación. Porque su trabajo es prevenir las dificultades y amenazas del proyecto y establecer las soluciones a los mismos. De esta forma el mismo podrá valorar posteriormente los resultados a dicha solución y de su efectividad.

¿Por qué necesitas desarrollar estas habilidades?

Si te interesa ser parte de la directiva de tu empresa, deberás plantearte seriamente este tema. En la actualidad en el momento de ascender a una persona de cargo no solo se toma en cuenta su trayectoria o experiencia, sino también su desenvolvimiento en la compañía. Una persona que ha demostrado cualidad y aptitud para trabajar con sus compañeros e incluso el saber solventar cuando ha sido necesario, es valorado por su talento humano. Por esta razón, debes comprender que desarrollar estas habilidades te otorgará las herramientas necesarias para destacar en este sector.