Curso de atención al cliente

Por su naturaleza crítica, el contacto entre cliente y empleado puede darle escalofríos a muchos emprendedores. Puede ser realmente atemorizante el confiar en los demás para que ofrezcan el servicio o producto que tan cuidadosamente ideaste, pues después de todo, ¿de verdad les importará tanto hacer un buen trabajo como a ti?

Para calmar estos miedos, las compañías a menudo invierten en asesorar y formar a sus empleados en vanguardia, es decir, los que tengan más contacto con los compradores. El curso de atención al cliente dará herramientas a los trabajadores para desenvolverse eficientemente en este apartado. Las grandes empresas ofrecen esta formación porque saben que es importante, pero también porque saben que no hay otra manera de hacer entender el mensaje.

El resultado es un empleado bien entrenado, que puede recitar un guion basado en los beneficios, darse cuenta de las posibles amenazas y enfatizar la importancia de la retroalimentación durante el cierre de un acuerdo. Esto toma un carácter vital cuando la naturaleza de tu negocio cientos de tipos de interacciones potenciales. ¿Debes mantener la misma táctica de formación? ¿Cómo mantienes la disciplina y el buen ánimo entre grandes grupos de empleados encargados de interactuar con el público? Son preguntas a las que como emprendedor tendremos que enfrentarnos eventualmente.

Gracias al curso de atención al cliente tus empleados serán capaces de:

Hacer de los clientes su prioridad más importante

La idea es integrar el servicio al cliente a cada aspecto de tu negocio. Empoderará a tus empleados para solucionar problemas autónomamente a medida que aparecen.

Colocarse en los zapatos de los clientes

Realmente muchas veces no tendrás la culpa de que un trabajo se salga del presupuesto, o de que un artículo no llegue debido a problemas climáticos, todo lo que entienden los clientes es que no estás cumpliendo tu parte del acuerdo. Desarrollar tu empatía hacia ellos te permitirá concentrarte en la solución de los problemas en vez de dar explicaciones largas, tediosas e innecesarias.

Mantener la calma

El curso de atención al cliente prepara al empleado para situaciones en las que el cliente se encuentra enojado. Cuando esto pasa, es fácil sentirse atacado y terminar respondiendo de manera defensiva. En vez de esto, hay que trabajar por remover las emociones de lo que está sucediendo, y así, concentrarte en escuchar atentamente las quejas del comprador, ordenar los hechos y dar a entender al cliente que comprendes su frustración. No tienes por qué estar de acuerdo con todos, pero podrás rectificar el inconveniente lo más rápido posible.

Escuchar y responder

El objetivo es saber hacer las preguntas correctas, para ello, debemos practicar una escucha efectiva de su situación. El curso de atención al cliente prepara al que lo realiza para saber cómo hacer que su cliente se sienta escuchado y comprenda que darás el todo por el todo con tal de ayudarle. Asimismo, naturalmente, la respuesta es de una importancia esencial. Debes responder así lo que te diga tu cliente no lo amerite realmente. Siempre se debe responder, en el caso de que el contacto sea en una llamada o por email, lo más rápido posible y antes de las 48 horas siguientes.

A menudo pensamos que la atención del cliente es lo que ejercemos cuando algo ha salido mal. Pero, puedes ofrecer un gran servicio incluso cuando has cumplido con las expectativas de tus clientes. El curso de atención al cliente nos capacita para desarrollar relaciones personales con ellos. Mantener pequeños contactos puede traer un gran impacto al bienestar de nuestros compradores. Saber anticiparse a los problemas, y ofrecer soluciones inmediatas es algo que se encuentra solo al alcance de los emprendedores, y los grupos de trabajo, que han realizado capacitación de calidad al respecto. No dejes que tus competidores, quienes muy probablemente ofrezcan un peor producto, se queden con tu público solamente porque saben cómo tratarlos mejor.