Comprender el estrés
El estrés suele ser una respuesta natural del cuerpo ante situaciones desafiantes, y nuestro cuerpo al percibir una amenaza o alerta de situaciones desafiantes, libera las hormonas del estrés: cortisol y adrenalina, quienes te ayudan a estar alerta y tomar las medidas necesarias para protegerte o enfrentar el desafío.
Sin embargo, cuando las situaciones estresantes son cotidianas o muy repetitivas, estas hormonas pueden tener efectos negativos en tu cuerpo causando supresión del sistema inmunológico, tensión muscular o inflamación crónica.
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Identificar sus fuentes
Identificar las fuentes de estrés en la cotidianidad es el primer paso para tomar medidas al respecto, estas situaciones son comunes en la vida personal como, por ejemplo: Problemas financieros, de relación, de salud, o cualquier otra cosa.
Una vez que hayas identificado sus fuentes, podrás empezar a trabajar en ellas y encontrar formas de reducir su impacto en tu vida.
Practicar técnicas de relajación
Existe una diversidad de técnicas que pueden ayudarte a relajarte y reducir los niveles de estrés, no solo de tu cuerpo sino también de tu mente, entre ellas están: la meditación, el yoga, la respiración profunda, la relajación muscular progresiva y el masaje.
Al probar las diferentes técnicas de relajación encontrarás la que más te guste y te funcione mejor y preferiblemente, conviértela en una rutina diaria para ayudarte a mejorar tu bienestar.
Mantener una alimentación saludable
Una dieta saludable y equilibrada puede ayudarte a mantener niveles estables de energía y reducir la ansiedad.
Incorporar alimentos ricos en nutrientes: frutas, verduras, proteínas magras y grasas saludables, en tu dieta diaria no solo debe ser un hábito para reducir la ansiedad, sino para mejorar la vida en general.
Hacer ejercicio regularmente
El ejercicio es una herramienta poderosa para liberar endorfinas, las cuales son sustancias químicas en el cerebro que pueden mejorar tu estado de ánimo y reducir la ansiedad.
Es importante encontrar una actividad física que te guste: caminar, correr, nadar, hacer yoga o cualquier otra cosa que te haga sentir bien, y realizarla al menos 30 minutos al día, cinco días a la semana y notarás los cambios notables en la vida.
Establecer límites y decir "no"
Un estado estresante muchas veces es causado por el exceso de compromisos y responsabilidades y aprender a establecer límites y decir "no" cuando es necesario puede ayudarte a reducirlo.
No asumas responsabilidades y compromisos que no te correspondan, dale prioridad a tus necesidades y responsabilidades para mantener tu salud y bienestar.
Buscar ayuda profesional si es necesario
Muchas veces, la tensión de un estado estresante es demasiado alta y es muy difícil controlarla por uno mismo, es aquí cuando necesitas buscar ayuda profesional, ya que estos podrán ayudarte a encontrar formas efectivas de manejar la situación y mejorar tu bienestar.
Buscar ayuda de profesionales siempre es una excelente opción y posiblemente sea la mejor decisión para mejorar tu calidad de vida y reducir el impacto negativo del estrés.
Para concluir, el estrés es una respuesta natural del cuerpo y su impacto en la salud no necesariamente es negativo, si se presenta en pequeñas dosis, pero si afecta tu salud física y mental debes buscar ayuda profesional. Esperamos que, con estas 7 claves presentadas en este artículo, puedas aprender a reducir el estrés en tu vida y mejorar tu calidad de vida.
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