En este sentido, hemos detallado una lista de problemas que pudieras enfrentar si tus habilidades directivas no están a punto:

·Empleados disconformes con el reconocimiento que obtienen: cuando los empleados no se sienten reconocidos por sus logros, o solamente son criticados por sus resultados, se sienten infravalorados y en constante miedo de cometer un error. Este es un problema común de un pobre desarrollo de las habilidades directivas, y si los empleados no se sienten reconocidos, no estarán motivados. Una apropiada capacidad de liderazgo incluye el poder de comunicarte efectivamente. No se trata solo de delegar, sino también de dejar saber a tu equipo que les valoras. Es importante que puedas señalar las fortalezas individuales de cada miembro de tu equipo, para que se sientan comprometidos y con energía en el trabajo. Tiene que haber comunicación abierta, consistente, donde empleados y empleadores se retroalimenten y los directivos provean guía a sus subordinados, para que puedan superar sus debilidades, al mismo tiempo que sus fortalezas y logros son celebrados.

·Reuniones inefectivas: el desarrollo de las habilidades directivas es sencillamente vital para tener reuniones que de hecho den resultados. Hay que aceptarlo: la mayoría de las reuniones son una pérdida de tiempo, pues se basan en el deseo de los gerentes por delegar la mayor cantidad de trabajo posible, y el desinterés del empleado en asistir y estar en la reunión. Peor aún, para muchos empleados las reuniones pueden significar dejar de trabajar en sus proyectos para enfocarse en llenar reportes, presentar nuevas ideas y compartir opiniones. Estas distracciones pueden matar su productividad y motivación. El desarrollo de las habilidades directivas te permitirá ser organizado, la cual es una de las habilidades más importantes para dirigir una compañía exitosa. Una buena gerencia significa identificar cuáles empleados deben asistir a las reuniones, y cuáles deben permanecer en sus tareas actuales. Por ejemplo, en ningún caso deberías arrastrar a todo un departamento para discutir un proyecto del cual se encargará solo un puñado de especialista. Aquellos que no tienen una responsabilidad directa, lo más probable es que se queden viendo a la nada, ansiosos por volver al trabajo. Usa una agenda para evitar iros por la tangente y culmina la reunión pidiendo retroalimentación.

·Miedo: si has descuidado el desarrollo de las habilidades directivas, serás un gerente con propensión a hacer sentir a sus empleados que sus trabajos corren riesgo, Cuando los empleados sienten que habrá despidos, los chismes corren a través de la oficina. Los trabajadores atemorizados incluso usarán el tiempo de trabajo para buscar nuevos empleos, y aunque no lo hagan, sus motivaciones se verán reducidas y dejarán de respetar y confiar en la junta directiva. Los managers que usan el miedo suelen culpar a otros, retener información y responder preguntas vagamente. No muestran compasión y crean una imagen de persona inaccesible, son impredecibles y esta incerteza infunde miedo en el equipo. En cambio, mediante el conciente desarrollo de las habilidades directivas, podrás crear un ambiente de honestidad y confianza. Tus empleados no tendrán que soportar un estrés constante, al preguntarse si cada día en sus cargos es el último. Ejercita la transparencia, compartiendo abiertamente información de la compañía que sea pertinente. En vez de culpar a otros, toma responsabilidad y transforma los errores en oportunidades para crecer.

·Ambiente de trabajo tóxico: cuando los gerentes son negativos, crean un ambiente de trabajo negativo. Si los empleados sufren de ansiedad y estrés, no van a trabajar bien. Un gerente con un limitado desarrollo de las habilidades directivas creará un entorno laboral basado en políticas inconsistentes, favoritismo y falta de presencia gerencial. Debes mantener las políticas consistentes, tratar a todos con justicia y estar presente y brindar apoyo. Debes estar en las trincheras con tus empleados, sin importar sus niveles.

Desarrollo de las habilidades directivas: conclusión

Cuando los gerentes están presentes, y tienen un gran desarrollo de las habilidades directivas, muestran que ven como iguales a todos los miembros de su equipo, lo que causa que los trabajadores se sientan cómodos al discutir cualquier aspecto relacionado con sus funciones. Una cultura transparente motiva el trabajo en equipo, y el mutuo respeto entre todos los niveles organizacionales.

Máster Internacional en Habilidades Sociales y Directivas